jueves, 19 de marzo de 2015

Excusas, excusas y más excusas













Para llevarnos bien con nosotros mismos tenemos que querernos más. El primer paso para lograrlo se trata de abandonar la llamada “zona de confort”, ese espacio conocido y cómodo, donde conviven hábitos, algunos buenos otros nocivos ,pero, nuestros “queridísimos hábitos al fin”. Abandonar la zona de comodidad implica cuestionarse que cosas debo cambiar, derrotar la creencia de que las cosas siempre fueron así, derrotar miedos a lo desconocido y luchar contra nuestras propias excusas y justificaciones para “no” hacerlo y ni siquiera intentarlo o abandonar en el camino.

“Quererse más” conlleva una batalla diaria con nosotros mismos pero que podemos disfrutar en lugar de padecer. El secreto reside en poner objetivos lógicos y medir en forma real nuestra expectativas para no resentirnos con nosotros mismos y sentir que fallamos.

La definición de excusa según el diccionario de la lengua española es "Motivo o pretexto para eludir una obligación o disculpar alguna omisión". Disculparnos de lo que no hacemos también puede transformarse en un habito.

Nuestra cabeza esta tan llena de excusas y escapes derroteros que ante el cambio de un hábito y la incomodidad que esto genera, casi sin percibirlo, estas se instalan como si fueran una creencia cierta y lógica ganándole espacio a nuestra propia voluntad.

Nadie esta excepto de este proceso. Creo que existen tantas excusas como cambios me proponga. Cuantas veces te encontras hablando con vos mismo y justificándote porque no hiciste esto o aquello? En mi caso muchas y esas justificaciones que me doy me producen un alivio a corto plazo y sin embargo, me generan culpa, ansiedad y angustia a la larga. Estas simples disculpas nos paralizan y nos dejan paradas siempre en el mismo lugar carcomiendo nuestras oportunidades.

Es tan interminable la lista las excusas con las que nos “ mal acariciamos” que las intente agrupar en distintos tipos y grupos para identificarlas:

• La Licencia Moral: “ Con todo lo que hice, con mi esfuerzo, con lo mal que la pase, con lo bien que lo hice… esta bien que hoy no lo haga”

• La Pospuesta: “ Hoy no puedo pero mañana no fallo” " El Lunes empiezo"

• La Falsa Elección: “ No puedo hacerlo porque estoy tan ocupada haciendo esto otro”

• La Falta de Autocontrol: “ Yo no puedo conmigo, soy inmanejable”

• Hoy no cuenta: “ Estoy de vacaciones” “ Estoy cansada” “ Es fin de semana”

• La Creencia Cuestionable: “ la etiqueta dice que es sano”

• La del Bien por los otros: “ no puedo hacerlo porque seguro les hace mal a ellos”

• La Cábala: “ y si hago algo distinto y me sale mal?”

• La de la culpa es de otro: “ Así no puedo hacerlo, el no me deja. Es su culpa”

Somos creativos en el arte de generar excusas sin darnos cuenta que lo que hacemos al no cumplir con nuestros planes de cambio es erosionar la propia confianza que tenemos de nosotros mismos y la imagen que sentimos ofrecemos a los demás. Simplemente con empezar a registrar cuando nos justificamos, que nos decimos y para que nos lo decimos ya estamos iniciando parte del cambio de llevarnos mejor con nosotros mismos.

Querete mas. Si queres podes y sin excusas.